EL GRAN BONETE Y LA DINÁMICA SOCIAL

 

Su origen es diverso se llama bonete a un municipio de España en la provincia de Albacete, este juego del gran bonete termina dando un significado irónico de un personaje de supuesta importancia que al fallar en una rueda de acusaciones de unos con otros por la pérdida de un ave se convierte en el más tonto.

Lo cierto es que este juego de niños terminó siendo un refrán político “EL JUEGO DEL BONETE”, donde los diversos colores de representantes políticos y sus organizaciones nunca tienen la culpa de lo que no hacen desde el poder como gobernante, como opositor para no dejar hacer o como promesa asistencial para ayudar a los más desvalidos sin importar el desorden social o estructural que conlleve a ello, lo cierto es que mantener la pobreza es una estrategia de aspiración política de todos los sectores sin excepción para enquistarse en el poder, rebotando las acusaciones justificadas para la sociedad, pero que van de unos a otros, no en vano tenemos 200 años de existencia como país y seguiremos siendo un país sub desarrollado porque a pesar de que tenemos un espacio donde las mentiras del bonetón no son aceptadas porque existe un respeto para con EL ACUERDO NACIONAL donde hay políticas de estado analizadas y aceptadas en consenso que tranquilamente podrían ser aplicadas  por cada gobierno de turno que solo lleva su programa coyuntural para justificar sus posibles 5 años de gobierno y que no daría excusa al poder legislativo para entrampar la ruta asignada como estado que ayudaría a recobrar la credibilidad, la confianza, a esgrimir una identidad nacional sólida a pesar de nuestra pluriculturalidad.

Nunca se le dio importancia a enrumbar la formación cívica y cultural desde la escolaridad y son mayoritariamente limitadas las unidades familiares que lo enseñan desde el hogar pero que trágicamente se van deformando en el camino vivencial en diferentes niveles, siendo el más extremo el concepto anárquico y/o de carácter delincuencial.

Lo cierto es que ante pocas alternativas de sobrevivencia la dinámica social debe resolver sus alternativas generándose empleos o negocios de manera formal los que estén en condiciones financieras de hacerlo, pero la gran mayoría de emprendimientos informales y sub empleos tienen la necesidad de hacerlo para solucionar sus problemas familiares, quebrando o cambiando sus tipos de emprendimiento porque no pueden dejar de trabajar independientemente y aún peor si se trata de los servicios básicos que debería tener cada persona o familia complicado por el desorden estructural que venimos arrastrando con el simple “juego del gran bonetón” que hace 200 años se quiere seguir sin entender, porque no hay convicción cívica ni cultural, prevalece el hedor político putrefacto que seguirá dañando a las generaciones venideras.

Mientras siga la necedad en la que se enrolan no solamente la clase política sino también profesionales y técnicos que manchan el rol de los colegios profesionales y no son sancionados como debería ser, pero, así mismo empresarios de la gran, mediana y pequeña empresa que olvidan su responsabilidad social, medidas previsoras para evitar accidentes de toda naturaleza hace que la desconfianza ante toda autoridad civil o pública se acentúe y prevalezca la informalidad en todos los escenarios como rechazo a las estupideces que reciben las comunidades.  

Atentamente

Romulo G. Tineira Agurto