LA CULTURA EMPRESARIAL Y LA SEGURIDAD Y SALUD EN EL TRABAJO
La Ley N*29783 obliga a las empresas sistematizar medidas preventivas contra todo tipo de riesgo laboral, significa entonces que iría conexo a los valores éticos de la empresa expuestos a sanciones penales por incumplimiento.
Tratar de la cultura empresarial es hablar de una disciplina que asumen los miembros gestores de un negocio donde se conjugan diversos valores, creencias y políticas de una organización pero que evidentemente se contrasta con los compromisos de bienes y servicios de la empresa.
Si bien la cultura empresarial va ligado a la innovación, las proyecciones de crecimiento, de afiatar un equipo disciplinado gerencial, de sistematizar un trato armónico interno y externo, de honrar sus compromisos contractuales pero cuando exceden su capacidad de respuesta ocurren casos inusitados y provocan omisiones preventivas sea por restar importancia al mantenimiento de máquinas y /o exigencias extremas donde fluyen hábitos y comportamiento quebrando su filosofía de trabajo y terminan ocasionando accidentes de trabajo.
Hago una reseña vivencial cuando por la década entre 1973 a 1985 trabajé en la empresa Moraveco S. A. allí la empresa tenía un departamento especializado con ingenieros en seguridad industrial donde supuestamente el concepto de cultura empresarial era muy arraigado en las gerencias, aplicaron capacitación al personal técnico y por boletines tal cual adjunto a la presente publicación hacían llegar a todos los trabajadores incluso tenían señalizaciones de zonas peligrosas.
Por otra parte existía malestar por incumplimiento de convenios laborales, ello ocasionó que los trabajadores estables y eventuales que eran numerosos restaban importancia a toda información, para ellos se simplificaba que su centro de trabajo era un compromiso laboral más, pero habían trabajos repetitivos automatizados que terminaban en accidentes con pérdida de dedos de sus manos entre otros accidentes.
Otra falla garrafal del departamento de seguridad industrial no participaron ni inspeccionaron la implementacion de la linea de ensamblaje de buses y el proceso de pegado de pisos de jebe con terocal altamente inflamable se puso al lado el proceso de soldadura de partes del bus, bastó una chispa que produjo un incendio afectando al trabajador a tal gravedad que las suelas de jebe de su calzado quedó pegado al piso quemándose gran parte de su cuerpo, gracias a Dios sobrevivió.
En otras empresas restaban importancia al mantenimiento de máquinas que terminaban complicando el ritmo productivo por demora en la reparación.
A la actualidad a pesar de que esta ley N *29783 obliga a las empresas cumplir rigurosamente con la norma sigue sucediendo accidentes incluso con la pérdida de vidas humanas por restar importancia a zonas de peligro eléctrico.
Por consiguiente "LA PREVENCIÓN " en todo proceso de bienes y servicios es lo que debería prevalecer en toda política de cultura empresarial.
Atentamente
Romulo G. Tineira Agurto
Tratar de la cultura empresarial es hablar de una disciplina que asumen los miembros gestores de un negocio donde se conjugan diversos valores, creencias y políticas de una organización pero que evidentemente se contrasta con los compromisos de bienes y servicios de la empresa.
Si bien la cultura empresarial va ligado a la innovación, las proyecciones de crecimiento, de afiatar un equipo disciplinado gerencial, de sistematizar un trato armónico interno y externo, de honrar sus compromisos contractuales pero cuando exceden su capacidad de respuesta ocurren casos inusitados y provocan omisiones preventivas sea por restar importancia al mantenimiento de máquinas y /o exigencias extremas donde fluyen hábitos y comportamiento quebrando su filosofía de trabajo y terminan ocasionando accidentes de trabajo.
Hago una reseña vivencial cuando por la década entre 1973 a 1985 trabajé en la empresa Moraveco S. A. allí la empresa tenía un departamento especializado con ingenieros en seguridad industrial donde supuestamente el concepto de cultura empresarial era muy arraigado en las gerencias, aplicaron capacitación al personal técnico y por boletines tal cual adjunto a la presente publicación hacían llegar a todos los trabajadores incluso tenían señalizaciones de zonas peligrosas.
Por otra parte existía malestar por incumplimiento de convenios laborales, ello ocasionó que los trabajadores estables y eventuales que eran numerosos restaban importancia a toda información, para ellos se simplificaba que su centro de trabajo era un compromiso laboral más, pero habían trabajos repetitivos automatizados que terminaban en accidentes con pérdida de dedos de sus manos entre otros accidentes.
Otra falla garrafal del departamento de seguridad industrial no participaron ni inspeccionaron la implementacion de la linea de ensamblaje de buses y el proceso de pegado de pisos de jebe con terocal altamente inflamable se puso al lado el proceso de soldadura de partes del bus, bastó una chispa que produjo un incendio afectando al trabajador a tal gravedad que las suelas de jebe de su calzado quedó pegado al piso quemándose gran parte de su cuerpo, gracias a Dios sobrevivió.
En otras empresas restaban importancia al mantenimiento de máquinas que terminaban complicando el ritmo productivo por demora en la reparación.
A la actualidad a pesar de que esta ley N *29783 obliga a las empresas cumplir rigurosamente con la norma sigue sucediendo accidentes incluso con la pérdida de vidas humanas por restar importancia a zonas de peligro eléctrico.
Por consiguiente "LA PREVENCIÓN " en todo proceso de bienes y servicios es lo que debería prevalecer en toda política de cultura empresarial.
Atentamente
Romulo G. Tineira Agurto
Comentarios
Publicar un comentario